Caracas, 11 de junio de 2024.- Este artículo es la continuación de uno publicado días atrás. Es la reconstrucción de las acciones humanas y políticas que hicieron posible el panorama de hoy. A pocas semanas de la elección presidencial, tenemos lo que hace unos meses lucía imposible: una líder nacional recorriendo el país, un candidato unitario ganador y “potable”, unos partidos políticos enfocados en lo electoral, un país entusiasmado y una dictadura que no termina de actuar.
Caracas, 10 de junio de 2024.- Si hace un año nos hubieran dicho que hoy tendríamos el viento a nuestro favor, algunos hubiesen dicho que era irreal. Para algunos, era imposible tener una líder nacional recorriendo el país, un candidato unitario ganador y “potable”, unos partidos políticos enfocados en lo electoral, un país entusiasmado y una dictadura que no termina de actuar.
Caracas, 06 de junio de 2024.- Decía Nelson Mandela que "la política debe ser la expresión más alta del espíritu humano”. Lamentablemente, nuestra realidad actual dista mucho de este ideal. En su lugar, asistimos a una degradación progresiva donde la mentira y la descalificación se erigen como herramientas predilectas, corroyendo los cimientos de la sociedad y sembrando las semillas de la desconfianza y el resentimiento.
Caracas, 17 de mayo de 2024.- Todo parece indicar que el próximo 28 de julio saldremos a votar y abriremos puertas a la democracia. Si todo sale bien, ese día le daremos el triunfo a Edmundo González Urrutia y derrotaremos a Nicolás Maduro. Llegar a esta coyuntura electoral no ha sido fácil. Por eso, conviene recordar algunos de los factores que la han hecho posible: la resiliencia política de María Corina Machado, la vocación unitaria de partidos políticos, el apoyo de la comunidad internacional y la valentía de los venezolanos, entre otros. La construcción de una ruta electoral ganadora fue posible por el compromiso firme de actores políticos claves con la estrategia de la unidad y el voto. Por eso, no dudo en decir: Lo que hoy es, pudo no ser.
Anzoátegui, 17 de mayo de 2024.- Mientras el gobierno negocia tras bastidores con el mismísimo imperio yanqui, como lo ha reconocido el propio Presidente, algunos oficialistas niegan con estridencia –casi con histeria- la posibilidad de una transición a la democracia en Venezuela, uno no sabe si lo hacen para sembrar desaliento en la población o para sabotearle una salida negociada y honorable a Nicolás Maduro. Además, negar la posibilidad de una transición es un reconocimiento tácito de la naturaleza autocrática del régimen, un contrasentido para un gobierno que procura mantener las formas democráticas en el ámbito internacional y es un esfuerzo inútil pues la maniobra no ha socavado el sentimiento de cambio instalado en el país como una “tendencia irreversible”. Por ello –pese a los deseos de quienes se aferran a sus privilegios y al poder- hay una posibilidad cierta de que se inicie en Venezuela una transición democrática, lo que está planteado hoy va mucho más allá de cambiar un presidente por otro. Al menos, esa es la aspiración de la inmensa mayoría del país.