Caracas, 02 de enero de 2019.- Recuerdo días cuando muchos venezolanos estaban embriagados del populismo chavista y sus medidas despilfarradoras, Hugo Chávez vociferaba sin mezquindad alguna, que su mandato sería hasta el 2021 pero cuidado si el proyecto político revolucionario no duraba 100 años, recuerdo que era el año 2008 y el precio promedio del crudo era 90 dólares por barril, el régimen estaba indigesto de dinero y de excesos, botando la suerte económica que vivíamos, entre la corrupción boliburguesa de sus enchufados y  proyectos de subsidios para el consumo, nunca se invirtió eficientemente en producción.

Destruyeron dolosamente el aparato productor que ya estaba instalado, sustituyéndolo por una economía de puertos, donde dejamos de producir lo propio, para darle paso a unas roscas de bandidos que hicieron sus grandes negocios a costa de la necesidad (Inducida por ellos) del venezolano; El régimen que nunca fue gobierno estaba haciendo todo para arruinarnos mientras nos embriagaban de excesos.

En esos años muchos eran los que defendían la revolución bonita, el proyecto del comandante Chávez, muchos a todo gañote apenas escuchaban una crítica hacia el gobierno gritaban, Viva Chávez, llegaron al punto de celebrar para estas fechas entre sí, La Chavidad, y así pasó el tiempo esperando año a año las medidas populistas, plan Venezuela Móvil, Venezuela Productiva, Misión Vivienda, Mi casa bien equipada, y en fin, hasta que el 2013 ya fallecido Hugo Chávez, Nicolas Maduro, asume la presidencia envuelto en un halo de ilegitimidad, con un barril de petróleo no tan alto y una PDVSA haciendo crisis por los estragos de la corrupción, tras unas dudosas elecciones donde se corona como primer mandatario. Ese diciembre para para intentar mitigar los efectos de la crisis económica que ya se estaban sintiendo, ejecuta una de las peores medidas intervencionistas y confiscatorias como el llamado Dakazo, demostrando así una cara más brutal, más ladrón y no tan revolucionario.

El hecho es que los Venezolanos empezamos a sentir la realidad de las medidas económicas que se venían tomando, esas navidades de abundancia y excesos cada vez mas se fueron extinguiendo de los hogares Venezolanos sin importar la condición social, ni económica, ya celebrar unas navidades como los Venezolanos estábamos acostumbrados era cada vez mas imposible de lograr, y el régimen en vez de rectificar, incentivar la producción nacional, lo que hacía era radicalizarse para destruir más, todos los años ahora Nicolas Maduro como representante de ese Chavismo, lo que hacia era vociferar como iba a vencer la guerra económica de los pelucones, ordenaba cada vez mas intervenciones ahora contra pequeños y medianos comerciantes también, y así en medio de Dakazos y escasez las navidades comenzaron a sentirse muy amargas, estos dos últimos años, no soportamos la amargura en nuestro paladar, el gobierno lo que le queda es engañar, hacer promesas ilusorias, que llevará a cada familia un pernil, juguetes, cajas de comida, que otorgará bonos, subsidios para garantizar una navidad feliz y vemos como los arrolla la realidad, con protestas por el mismo pernil que nunca llega, ancianos haciendo días de cola para poder cobrar el bono navideño que solo le alcanza apenas para un pollo, o la tristeza generalizada que se siente en nochebuena cuando nos aturde el silencio de quienes ya no están sentados en nuestra mesa.

Ojala que esta sea la ultima CHAVIDAD, que mas nunca se repita este modelo económico – político, ni nada similar, hemos aprendido muchos con lagrimas y otros con sangre esta cruel lección, lo inmediato es salir del régimen que nos ahoga en sufrimiento y no gobierna, debemos prepararnos todo para lo que vendrá y hacer lo que nos toque para procurar el cambio hacia la libertad, atentos que el 05 de enero, algo pasará y ojala permita que este 2019 volvamos a recuperar junto a nuestra familia nuestra FELIZ NAVIDAD. Animo Venezuela.