La Asunción, 07 de marzo de 2016.- Nuestras reflexiones de hoy se las dedicamos a la organización política donde militamos Primero Justicia, en el marco de su 16 aniversario, tolda que nos recibió hace 10 años, donde hemos cosechado grandes amistades y afectos. No podría hoy enumerar a todos con quienes he compartido a lo largo de estos años en Primero Justicia en mi querido Municipio Arismendi, en nuestra Nueva Esparta y a nivel nacional, lo que quiero es hacer un recuento de las situaciones estelares y polémicas que en estos 16 años, ha protagonizado Primero Justicia.

Es así como hablamos que, de su génesis, esta organización venía gestándose para asumir un relevo generacional en los años 90, ante la crisis del bipartidismo tradicional y lastimosamente, los tiempos del país fueron otros y el relevo político encarnado en la revolución no fue más que un ejercicio de revanchismo de actores, igual de desgastados que los del bipartidismo. Sin embargo, Primero Justicia sale a la palestra en el estado Miranda y logra escaños en la Asamblea Nacional en el año 2000, donde llegan cinco diputados, que en ese entonces parecían  cien.

El país se sorprendió cuando vio a unos jóvenes enfrentarse al pasado y el presente, defendiendo el futuro. Muchos recuerdan la travesura parlamentaria de meter un cochino a la Asamblea Nacional, en protesta a un nocivo pacto entre el bipartidismo y la Revolución, para nombrar el TSJ y al Fiscal General que terminó politizando la Justicia en Venezuela.

En el mismo año 2000, empieza el sueño de una Venezuela moderna y posible con dos gestiones municipales de alto impacto en la Gran Caracas con el sello de Primero Justicia: en el Municipio Baruta con Henrique Capriles Radonski y en Chacao con Leopoldo López. Todos en esa época, comentaban sobre ese fenómeno social que se daba, e inclusive se sigue sintiendo al salir de Baruta o Chacao y entrar en el Municipio Libertador (Caracas).

Pasados algunos años, se suman liderazgos desde otras localidades del país y Primero Justicia sigue ganando espacios locales hasta el punto de alcanzar alcaldías en el interior del país, la Gobernación de Miranda y para acabar con los epítetos del gobierno e inclusive algunos de oposición quienes acusaban a Primero Justicia de “sifrinos”, “lechuguinos” y “petimetres” pero Carlos Ocariz se convierte nada más y nada menos que en el Alcalde de Petare, municipio de mayor concentración de zonas populares en Latinoamérica.

Hemos pasado momentos difíciles dentro de nuestra organización y en la alianza opositora, como cuando aquel año 2005 nos opusimos al retiro de candidaturas a la Asamblea Nacional, postura que ocasionó una división en nuestro partido y muchas críticas en ese entonces contra nuestro coordinador, Julio Borges quien se opuso a esa medida del retiro parlamentario, impulsada por los partidos tradicionales de la alianza opositora que, para ese entonces, eran mayoría en la coalición. Siempre nos mantuvimos firmes en generar cambios de manera constitucional, sin tomar atajos y del lado de la gente, siempre buscando ser los generadores de cambio que mejoren nuestro país. Iniciamos también un proceso de abrir espacio a las regiones en la política nacional, incorporando líderes regionales en la conducción nacional del partido lo que permitió entender y fortalecer los equipos regionales de la organización. Este proceso encabezado por el Secretario General del partido, Tomas Guanipa, quien venía de la dirección del PJ en el estado Zulia.

Y seguimos, año tras año, avanzando en la lucha y apostando a la renovación de la dirigencia política, apostando al liderazgo joven. Para el 2010, teníamos ya la representación más joven en cargos de elección popular: una bancada joven en la AN, Henrique Capriles como Gobernador, el más joven del país y este servidor, quien le escribe, el alcalde más joven del país. En el año 2012, consolidamos nuestro liderazgo nacional de la mano de Capriles Radonski, convirtiéndose en el gran líder de la coalición opositora en unas elecciones internas realizadas en el año 2012. Pero no todo ha sido color de rosa: el partido ha tenido que sortear trabas y zancadillas de propios y extraños, en muchas ocasiones. En lo personal, no siempre he estado de acuerdo con algunas decisiones y alianzas que, en estos mismos espacios critique en aquel comentado artículo “¿Y qué nos pasó?”. Hemos dado traspiés y hasta tropezado pero, gracias a Dios, no hemos caído en la tentación de abandonar nuestra organización por desencuentros momentáneos y siempre me termino reconciliando con la coherencia y claridad política de nuestra organización, con su capital humano, con el desempeño de mis compañeros de lucha como el Diputado Jony Rahal con quien comparto roles de conducción del partido en Nueva Esparta.

Hoy, estamos sumados a la propuesta del referéndum revocatorio que no es más que una muestra más de la coherencia política de nuestra organización que cree firmemente en la Unidad ¡pero sobre todo en la gente! Me despido, agradeciéndole a todo aquel que en algún momento porto la camisa aurinegra, a mis compañeros de lucha en toda Venezuela que apuestan al futuro, al final… ¡Ser militante de Primero Justicia es ser militante del futuro! ¡Es ser militante del progreso!