Caracas, 21 de diciembre de 2014.- Cuba y Estados Unidos dieron un paso formidable esta semana hacia la normalización plena de sus relaciones diplomáticas, producto del diálogo y de la mediación del extraordinario papa Francisco. Aplaudimos de corazón esa iniciativa y esperamos que esos cambios abran paso a la democratización progresiva de la hermana república de Cuba.

Contrasta esa noticia con el Gobierno de Venezuela peleando con EEUU, en lugar de atacar los graves problemas de derechos humanos que tenemos.

Maduro busca desesperadamente con quien pelear, en momentos en los que necesitamos diálogo, tolerancia y escuchar consejos para restituir un clima de confianza que les dé tranquilidad no solo a los ciudadanos venezolanos, hoy en medio de la zozobra y la incertidumbre, sino también a inversionistas nacionales y extranjeros, para que apuesten por el desarrollo de nuestro país. Hoy, esas condiciones no existen.