‎Portuguesa, 3 de noviembre de 2014.- Cinco años duraba un periodo Presidencial con la alternabilidad en el poder, nuestra Democracia tenia debilidades pero era robusta y con grandes fortalezas.

Hoy para nuestros hijos se va haciendo difícil explicarles de la abundancia que vivíamos y la pérdida de calidad de vida. Nuestra economía con sus tras pies teníamos el “Hecho en Venezuela”.

Hoy vivimos días de ineptitud eficiente, un modelo económico de desmontaje sistemático del aparato productivo con su efectivo deterioró económico, poco a poco se ha reducido la oferta de cualquier bien o producto con su aumento acelerado e inflacionario de todo.

Está demostrado que este modelo económico que vivimos solo nos lleva a un desastre al ir poco a poco depender cada día más de lo importado y distribuido por empresas o institutos del Régimen.

La libre empresa es casi un pecado y el producir una hazaña.

Leyes modernas y libertades en lo económico con la oferta y la demanda de manera sana es la vía que lo social y lo productivo se enlacen en una sana convivencia para que el desarrollo nos reimpulse.

Tenemos que recordar como vivíamos hasta hace muy poco y despertar de esta ineptitud eficiente en que se premia al que esta enchufado y con precios injustos se castigue a quien apuesta en dar empleo y producir en Venezuela.

Necesitamos una AN con Diputados que crean primero en Venezuela y así comenzar a despertar nuestras empresas y fabricas y con orgullo exportar lo que producimos.

Nuestros Diputados quienes creen en el progreso y un país de igualdades no pueden permitir que continúe la regaladera solo para compra de conciencias a nivel mundial.

Nuestra Venezuela merece una mayoría de  Diputados que la quieran y la liberen de leyes oscuras y anacrónicas con alta carga reguladora que lo único que ha logrado es que el invertir en Venezuela es casi imposible, realidades que son tomadas en cuenta por las empresas a nivel mundial al momento de invertir.

La Venezuela de progreso será de producción y crecimiento por eso nuestro deber es en todo lugar hablar con la gente. Y que todos juntos soñemos en esa Venezuela posible ‎de producción libertades inversiones para que nuestro salario alcance y no de frustración ya que un par de zapatos cuesta más que una quincena de la mayoría de los Venezolanos.