Baruta, 29 de agosto de 2014.- ¿Recuerdan cómo a finales del mes de noviembre del año pasado se marcaban a las personas con un número en el brazo? Tal cual como un ganado, sólo para poder comprar algún tipo de alimento. Todo esto terminó y ahora los eruditos revolucionarios incluyeron la tecnología como una herramienta para taparear la falsa idea de la soberanía alimentaria y los escasos niveles de producción.

Luego que el gobierno destruyera el aparato productivo nacional, se endeudara en importaciones que luego dejaría vencer y podrir en los puertos del país, pretende limitar el consumo del venezolano a través de un sistema que sólo busca controlar lo que comes y cuánto comes. No estoy hablando de Cuba, una nación que por no contar con los recursos necesarios ni cadenas de supermercados sólo utiliza una “tarjeta de racionamiento”. Cualquier coincidencia es pura casualidad.

Ahora bien, las personas que van a Mercal o PDVAL, no pueden comprar únicamente lo que necesitan, deben hacer una compra significativa si se quieren llevar un kilo de leche o simplemente un kilo de arroz. En la red de Abastos Bicentenario, la cosa es peor, ya que las kilométricas colas no te garantizan poder comprar lo que necesitas,  tras tener que madrugar y lanzarte a la aventura que puede significar una madrugada en Caracas. Por último, en los abastos y  cadenas de supermercados privados, aunque la cola no es tan escalofriante, las condiciones son prácticamente las mismas.

¿Cómo garantiza el sistema biométrico el poder encontrar lo que necesito y cuando lo necesito,  si prácticamente en el país no se está produciendo nada?, ¿Acaso el sistema biométrico sabe el número de integrantes de mi familia o cuántas arepas me como?, ¿será que los buhoneros que cuentan con muchos productos catalogados como “oro” tendrán un sistema biométrico para realizar sus ventas?, ¿este sistema tendrá una opción que diga ”Trampa” para que los enchufados del gobierno puedan ultrajar a su conveniencia, si es que la utilizan?

Al parecer, a partir del 30 de noviembre se comenzará a utilizar este innovador sistema que según desde Miraflores, garantizará la soberanía del consumidor a pesar que no garantiza altos niveles de producción. Invito al gobierno a colocar el sistema biométrico en las reservas nacionales o mejor aún, en cada uno de los ministerios y vicepresidencias que es donde se hacen los grandes negocios. Con este sistema por lo menos ya nos están dejando de ver como ganado, ahora nos robotizan.