Caracas, 23 de julio de 2014.- Los derechos humanos son ciertos derechos básicos que son comunes y se derivan de la condición de ser humano. Asimismo, éstos surgen por la necesidad de garantizarle al individuo ciertos derechos mínimos en su relación con el Estado, es decir, los mismos surgen de la relación individuo – Estado. De esta manera, si todos fueran lesionados, por cualquier circunstancia, se está lesionando al mismo poseedor de los derechos, es decir, al ser humano.

Concretamente, el derecho a tratar en este análisis es el derecho de propiedad, es decir, ¿por qué el derecho de propiedad es considerado un derecho humano y por lo tanto inherente al mismo?, ¿y por qué se debe proteger?

Desde que el ser humano nace, se hace dueño de diferentes cosas, por más pobre que sea, desde su nacimiento empieza a ser propietario de cosas, y esta primera propiedad constituye su cuerpo mismo. Por lo tanto, el ser humano es propietario de su cuerpo y, aunque no lo sabe, lo cuida porque es de su propiedad (salvo excepciones por causas patológicas). De esta misma forma, en la infancia va adquiriendo nuevas cosas; como por ejemplo: juguetes o chupones, los cuales defiende si ve que están siendo amenazados por otro ser. Así, vemos cómo el ser humano desarrolla instinto de pertenencia sobre las cosas que posee, desarrollando así una necesidad. En consecuencia, el ser humano tiene la necesidad de ser propietario de cualquier tipo de cosas materiales e incluso inmateriales.

De esta misma manera, así como un bebé llora y trata de salvaguardar su chupón y sus juguetes; a lo largo de la historia, la humanidad ha desatado guerras, devastaciones, catástrofes y desgracias enteras por la defensa de tierras, casas, animales, castillos, negocios, etc.; que constituyen sus pertenencias, defendiendo así su legítimo derecho de propiedad. Inclusive, miles de millones de personas a lo largo de la historia han sacrificado su derecho por excelencia y el más importante de todos, el cual es el derecho a la vida, por la defensa de su derecho de propiedad.

Por otra parte, si analizamos el derecho positivo que se conoce y se practica hoy, en materia penal el delito más castigado y más perseguido a lo largo de la humanidad, después del homicidio, es el robo, el cual constituye la forma más evidente de violación al derecho de la propiedad.        

Desde otro punto de vista, en las religiones como el judaísmo y el cristianismo, se consagra el derecho de propiedad en Los Diez Mandamientos que Dios le entrega a Moisés, concretamente, en el séptimo mandamiento dice que: No Robarás; y el noveno mandamiento que dice: No Codiciarás los Bienes Ajenos. Esto nos muestra cómo las sociedades antiguas ya tenían una concepción acerca del derecho de propiedad y ya lo defendían.

En cuanto a las limitaciones, en principio, se considera que todo derecho humano es, entre otras cosas, ilimitado, es decir, es absoluto. Sin embargo, en el caso del derecho de propiedad, así como otros derechos, hay ciertas limitaciones. Aunque, esas limitaciones están muy ligadas al sistema político que se esté aplicando en cada país. Generalmente, cuando los intereses del colectivo exceden al interés privado del propietario, prevalecerán los intereses colectivos, pero indemnizando previamente y justamente al propietario de la propiedad que es considerada de utilidad pública, y siguiendo los mecanismos que la legislación pertinente haya previsto.

Ahora bien, se puede decir con toda seguridad que el sistema político que garantiza más ampliamente el derecho de propiedad es el sistema democrático, ya que respeta cabalmente este derecho, establece mecanismos para la defensa del mismo y lo promueve mediante sus políticas. Por otra parte, sistemas como el comunista no respetan el derecho de propiedad, ya que según esa doctrina la propiedad privada no existe y las cosas pertenecen al Estado, que la administrará para toda la colectividad. Ahora se ha buscado atenuar esta idea afirmando que existe una propiedad privada individual y otra a gran escala, incluso inventando varios tipos y clasificaciones de propiedad. En realidad estos nuevos tipos y clasificaciones son ficciones creadas por regímenes que no buscan respetar el derecho de propiedad y se excusan en estas teorías para violar este derecho.

Otro aspecto que va muy ligado al aspecto político es el aspecto económico, es decir, el significado que tiene el derecho de propiedad en la economía. Francamente hablando la propiedad privada es el eje y el motor de la economía y eso es innegable por cualquier doctrina. Se debe garantizar la propiedad privada para que cada quien cuide y explote por sus propios medios dicha propiedad, y para que pueda existir un mercado donde se intercambien bienes y servicios, debido a que no todas las personas pueden producir todos los bienes y servicios que necesitan para vivir.

La propiedad privada es un derecho intrínseco al ser humano y, aunque gobiernen regímenes totalitaristas o comunistas en cualquier nación, siempre van a prevalecer las características innatas que tenemos como seres humanos, ya que nos pueden arrebatar nuestras propiedades, pero nuestros instintos y nuestras ganas de luchar por lo nuestro, no podrán arrancárnosla nunca. Por esta gran importancia, el derecho de propiedad está constituido como un Derecho Humano, con todo lo que implica este rango.