Baruta, 11 de julio de 2014.- Una especie de juego entre el más fuerte contra el débil, arbitrado por la indiferencia. Así podría definir lo que está pasando en nuestro país con el tema de la inseguridad. En materia de seguridad ciudadana, como en su mayoría, para no juzgarlo todo, la revolución se ha convertido en un rotundo fracaso.

Recientemente se puede escuchar un sin fin de calificativos que describen lo que pasa en nuestro país, especialmente en nuestra ciudad. “Morgue Hugo Chávez”, “Caracas la Ciudad de la Muerte” o así como en Tierra Santa hay un Muro de Los Lamentos, en nuestra santa tierra tenemos ciudades de lamentos.

La morgue de Bello Monte, se ha convertido uno de los lugares más concurridos de nuestro país, allí se encuentran las victimas del salvajismo inhumano generado por la inseguridad, a la vista de los organismos que no hacen más que fracasar en sus políticas de seguridad ciudadana. Sólo en Caracas alrededor de 2.000 cadáveres ingresaron en la morgue entre los meses de enero a junio. Desde la llegada de la llamada “Revolución” y su precursor al poder, Venezuela vive una escalada continua de muerte: de los 4.000 asesinatos de 1998 hasta los 21.692 de 2012 y los 24.763 del año pasado, según fuentes independientes.

Al parecer, esta realidad no les preocupa a quienes viven detrás de sillón ministerial o gubernamental, sólo quita el sueño a un “pequeño” grupo, 30 millones de venezolanos que cada día viven la gran proeza de llegar a casa, sano y salvo.