Jorge Barroso: Represión vs Seguridad


Caracas, 09 de abril de 2014.- Venezuela cada día se sumerge más en la fatalidad, la violencia y la criminalidad sin que el Estado se conduela de ello, ni haga nada para que dicha lamentable realidad cambie. Nuestro país se desmorona a pedazos producto de la irresponsabilidad política de quienes hoy gobiernan.

Durante 2013 murieron cerca de 25 mil venezolanos; cuyos familiares no han recibido justicia en su gran mayoría. Mientras que en lo que va de año van cerca de 3 mil; y como es costumbre en el Gobierno, nadie da la cara. Cifras como esas evidencian que vivimos en un país que está en guerra. En lo que sí ha sido efectivo el Gobierno, es en la represión a la disidencia; pues reprimir manifestaciones pacíficas se ha convertido en una abominable pasión para ellos. Si al menos un gramo de esa misma pasión por reprimir, se ejerciera ante la violencia desatada, el país sería otro.

Caracas se ubicó a inicios del año 2014 como la segunda ciudad más violenta de Latinoamérica, según la ONG mexicana Seguridad, Justicia y Paz; especialistas en la materia recalcan que el Gobierno debe fortalecer las instituciones públicas, las policías y el patrullaje para bajar los índices de delitos. Hace pocos días, la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, recordó el balance de víctimas, por los hechos violentos del último mes y medio; dando un parte de victimas y detenciones, en seguida, vino a mi mente la despiadada imagen de aquellas madres desesperadas porque asesinaron a sus hijos para robarlos. ¿Quién se responsabilizó por los más de 27.000 venezolanos que murieron en hechos violentos entre 2013 y lo que va de 2014?

Sin duda que la violencia se combina con una impunidad titánica, según cifras del Observatorio Venezolano de Violencia, para 1998, por cada 100 homicidios que se cometían en el país, hubo 118 detenciones. Desde hace cinco años, por cada 100 homicidios que se cometen en el país teníamos 8 o 9 detenciones.

Es repudiable que en el 91 o 92% de los homicidios ni siquiera hay una persona detenida, eso hace que los delincuentes se sientan con carta libre para matar, saben que no hay ninguna posibilidad de ser capturados.

Sin duda, un mundo paralelo, un contraste que gana terreno; hoy más que nunca no se puede ser indiferente ante la impunidad.

Por esas razones, una gran mayoría de los Venezolanos se empeña en mantener encendida esa lucha firme por la libertad, algo que se escapa del escenario político, que abarca el sentir de un pueblo que vive crudas realidades y que hoy se empeña en poner en jaque y escapar del gobierno de Nicolás Maduro, un gobierno nefasto, un régimen no democrático y hegemónico que hunde, sin derecho a réplica, a nuestra querida Venezuela.

blog comments powered by Disqus