Caracas, 02 de febrero de 2014.- ¿Cuál es la manera más sencilla de explicar la crisis de Venezuela? Es como un grupo de amigos, o más bien una patota (el gobierno) que se ganó una mega lotería (1.000.000.000.000,oo de dólares por ingreso petrolero a 100 dólares el barril) y en lugar de invertir esa Boloña de dinero en una empresa o un negocio (producción nacional), se lo rumbearon todo en caña y fiesta (corrupción) y malbaratar en tonterías (regalos a otros países).

Además de rumbearse ese dinero, se pusieron a pedir prestado (deuda venezolana: 145.000 millones de dólares).

Como a las 5 de la mañana de la rumba (hoy) se les acabo la plata, la caña, la comida y los reales que pidieron prestado.

Se quedaron arruinados y sin trabajo (no producen nada).

Entonces la patota decidió salir a la calle y quitarle la plata a la gente de la comunidad por la fuerza (devaluación e inflación) y echarle la culpa a los demás de sus errores, corrupción y mal manejo.

Diosdado: ¿a quién engañas?

Diosdado Cabello sorprendió esta semana a los venezolanos, al darse por enterado que por la vía del contrabando se fuga a Colombia el 30% de los alimentos comercializados en nuestro país. ¡Vaya desvergüenza luego de 15 años de gobierno! ¿Quién cuida las fronteras? ¿Acaso militantes de Primero Justicia? No solo alimentos se van para el vecino país, sino importantes volúmenes de gasolina, electrodomésticos y cualquier otro bien cuyo precio en Venezuela sea sustancialmente más barato acá que en Colombia. El contrabando no solo NO es combatido por las fuerzas del orden de nuestro país, sino que cuenta en muchos casos con su complicidad y activa participación. Como en muchos otros problemas que afectan gravemente el país, la solución pasa por contar con organismos contralores independientes, con capacidad para investigar y sancionar, sin compadrazgos ni compromisos políticos. Mientras tanto, las declaraciones de Diosdado no serán más que un saludo a la bandera.