Cojedes, 20 de enero de 2014.- Hoy Venezuela se encuentra en un profundo aprieto, en los aspectos donde fijemos la mirada, ya sea la polarización política que asfixia la verdadera democracia; la recóndita crisis económica en la que hemos sido sumergidos, en consecuencia a los desaciertos en los modelos económicos establecidos por el gobierno; el tema de la violencia, que hoy sigue siendo la pesadilla de la sociedad de bien, son miles los hermanos y hermanas muertos por la reinante delincuencia, que hoy pareciera puede más que la voluntad de un sector en buscar alejar esta problemática y dejar a un lado tanta política ideológica, que solo protege con celos la permanencia de ese grupo en el poder.
Cojedes, nuestra tierra, no escapa de esos y otros diferentes problemas, el desempleo es una constante en un estado, que sigue atado a la dependencia laboral ofrecida únicamente por los entes gubernamentales. Vencer estos obstáculos, que se nos presentan para el desarrollo progresivo que podamos gozar en un futuro depende, así lo creo, de un sincero proceso de reflexión. Me refiero a que solo con voluntad y estableciendo un dialogo, entre los diferentes sectores que hacemos vida en el estado, podremos darle respuesta a cada inconveniente, que no son imposible de subsanar.
Los que hacemos vida política, y quiero abrir la brecha más allá, los que estamos hoy en la acera del frente a este gobierno, que además creemos es posible un Cojedes mejor, merecemos avanzar en muchos aspectos. Si bien es cierto se han hecho esfuerzos francos en buscar ser una oposición fuerte, y cautivar un mayor sector del electorado en la entidad, también creo es momento de reflexionar y fijar nuevas estrategias que permitan obtener mejores resultados que los conseguidos. Es hora de una Renovación general de la política en nuestros cuadros, creo es el tiempo para avanzar en sembrar nuevos liderazgos que sus cosechas se traduzcan en victorias, y a su vez, en dar solución a los problemas que nuestros pueblos esperan sean resueltos.