Pedro Figueredo: La inseguridad en nuestros barrios


Cojedes, 29 de octubre de 2013.- El tema de la inseguridad reinante, y el temor derivado de ello en la población, es una de las constantes que se nos plantean en cada uno de los recorridos que a diario realizamos a los diferentes barrios de nuestro municipio. Cada familia tiene en su haber algún acto  delictivo que le ha sobrevenido y,  en muchos casos, tiene que ver con algún familiar cercano que ha sucumbido ante la violencia. Muertos y heridos es el saldo final, con su secuela de mutilados, viudas y huérfanos. En muchos delitos de los que a diario se cometen, está presente la violencia. Y son los jóvenes los actores y sufridos principales. En cada comunidad nos mencionan varios de estos casos. Ninguna madre quiere ver a sus hijos caer como víctimas de la violencia delictiva, independientemente de lado en que se encuentren. Al fin y al cabo, podemos decir que todos son víctimas. ¿Qué decir de un joven de quince o dieciocho años que a esa edad ya se encuentra con un prontuario en su haber? Son las victimas sociales de un modelo que ya en catorce años se siente y se sabe sin respuestas, y por el otro lado, las victimas de quienes delinquen, son doblemente víctimas, pues también lo son de ese modelo que no ha sabido definir y/o formular una política de seguridad que garantice la paz y la tranquilidad. Es un modelo que ha fracasado en la primerísima tarea de brindar seguridad y protección, que no ha garantizado justicia a los ciudadanos.

En nuestros recorridos nos encontramos con esta cruda realidad, y con los habitantes de esos barrios abandonados, en los cuales no existen los servicios básicos, nos hemos comprometido en llevar adelante una gestión al frente de la alcaldía que resuelva los problemas básicos: agua, aseo y electricidad, que incorpore esos espacios a la planificación urbana como parte fundamental del Plan de Desarrollo Urbano Local (PDUL), abriendo las oportunidades para que esas comunidades puedan crecer dentro de un marco de planificación que ordene el crecimiento; que cada ciudadano en los barrios tenga la seguridad de que no necesita invadir un terreno para construir un rancho, sino que la alcaldía, dentro de su gestión pueda anticiparse a esas necesidades; que cada comunidad,  barrio o urbanización sepa cómo será su crecimiento: viviendas, calles, escuelas, áreas comerciales y recreativas, servicios primarios de salud etc. Se trata de que cada uno de los tinaqueros, viva donde viva, se sienta participando de un proyecto de desarrollo municipal, el cual hemos denominado “Tinaco 2030”.

¿Y cómo hacer con el problema de la inseguridad, el cual es de por si complejo por su relaciones multicausales y de manejos múltiples en lo que son los horizontes de planificación, y que además se le añade que en materia de competencias, no está justamente dentro de las que corresponden propiamente al municipio?. Pues en esto estamos muy claros. Si bien el gobierno ha asumido la totalidad de las atribuciones en materia de seguridad, dejando al municipio algunos temas de tipo “civil” y “comercial”, no eludiremos ni nos esconderemos detrás de la excusa de que no es de nuestra competencia. No. Desde el primer día participaremos activamente con los vecinos y ciudadanos de los barrios y comunidades para buscar soluciones, y también para exigir que quien decidió asumir esa área, creando la Policía Nacional,  asuma su responsabilidad, y el municipio estará allí para cooperar en todo lo que sea necesario. Cojedes es hoy uno de los estados  con más homicidios del país, y Tinaco suma su cuota en esta lamentable estadística. Sin embargo, creemos firmemente que si es posible tener un municipio seguro para la vida.

blog comments powered by Disqus