Tinaco, 25 de septiembre de 2013.- Definitivamente apuntamos al futuro, al mismo tiempo que resolveremos los problemas del presente. No hay Tinaco 2030 sin Tinaco 2014. Cada día debemos ir sentando las bases de ese espacio vital que queremos para el futuro. No es tarea fácil, pero asumimos el reto y gracias a Dios y con un equipo multidisciplinario comprometido con el cambio y el progreso, lograremos construir un futuro mejor.
Hoy, nuestro municipio marcha a la deriva. Cada quien debe salvarse como bien pueda. No hay objetivos que nos guíen, no hay un rumbo claro ni un punto en el horizonte que nos indique la dirección. No, no hay faro que desde lo lejos nos marque el rumbo. Vivimos una situación de anarquía generalizada, y lo más fácil sería decir que la gente tiene la culpa, que hacemos lo que nos da la gana; pero no es así.
Cuando el organismo rector, ese que debe guiarnos, que debe marcar la pauta, establecer las normas que permitan que todos los jugadores del equipo cumplan cada uno con el rol asignado carece de la autoridad, cuando ese organismo que llamamos la alcaldía y el concejo no han sabido marcar el objetivo y trazar el camino, cada uno de los ciudadanos está en la obligación de hacer lo posible por progresar, por garantizar el desarrollo individual y de los miembros de su familia. Por ejemplo, si la Cámara municipal no asume y cumple su rol de establecer las pautas del crecimiento urbano del municipio, y si en función de ello no se establecen las normas acordes con esa perspectiva de crecimiento, cada quien va ocupando un espacio y construyendo su vivienda, su negocio de la mejor manera posible, como mejor considera que le ajusta. Por tal razón en algunos casos observamos construcciones que en sana lógica no se ajustan a parámetros lógicos, y ello no sólo afecta construcciones particulares, sino que influye en el diseño urbano y en las construcciones públicas, como calles y avenidas, pero también limita el crecimiento comercial, las ubicaciones residenciales e industriales.
Tinaco necesita con urgencia un Plan de Desarrollo Urbano Local (PDUL), que oriente nuestro crecimiento como comunidad organizada no sólo en el momento presente, sino que también nos marque el rumbo hacia el futuro. Cómo y hacia dónde crecer urbanísticamente, comercialmente, industrialmente. Cómo definir una tabla de valores de los terrenos urbanos, y donde construir determinados inmuebles. Expongamos esto con un ejemplo: ¿Dónde debe estar ubicado el terminal de pasajeros de la ciudad? ¿Dónde debemos promover la zona industrial?. ¿Dónde debemos construir y preservar para las futuras avenidas?. ¿Dónde ubicar los parques metropolitanos y urbanos para el disfrute y la recreación?
El PDUL de Tinaco será una de las acciones de mayor importancia en cuanto a Planificación para el Tinaco 2030, y lo realizaremos con la participación de todos los Tinaqueros, y sólo luego de una amplia discusión y análisis llegaremos a un consenso; sólo después de lograr consenso lo someteremos a la consideración de la Cámara municipal para darle validez legal. Será labor desde el primer día como alcalde.