Trujillo, 05 de enero de 2023.- Después de haber contado con importantes presupuestos que dotaron de muchísimas obras y servicios que necesitaban los barrios y sectores populares del país en épocas de la cuarta República, estados y municipios ahora ni siquiera poseen recursos para simples mantenimientos.

En tal sentido, el “zarpazo” que viene ejecutando el régimen madurista en contra de la descentralización de la gestión pública continúa avanzando de forma ilegal e inconstitucional por medio del Poder Popular y el Estado Comunal.

Así lo señaló el vicepresidente de Asuntos Políticos de Primero Justicia Trujillo, Marcos Montilla. A su parecer, la normativa arrebata a los trujillanos, y en general a las regiones, recursos y competencias, que se reflejan en el deterioro de la calidad de vida de los venezolanos.

"Cada día vemos que el centralismo no funciona para solucionarle los problemas a la gente ni a sus comunidades", dijo Montilla.

El exalcalde de Carvajal indicó que las políticas públicas para el mejoramiento integral de los barrios y sectores desaparecieron en los últimos años a manos de gobernaciones y alcaldías revolucionarias. Hoy hay mayores niveles de pobreza, carencia de servicios e infraestructura, generando una desmejora sustancial en la calidad de vida de los vecinos.

"Los gobiernos regionales y municipales rojos rojitos dejaron de invertir en obras de infraestructura fundamentales para proveerlos y equiparlos de servicios públicos básicos como agua potable y cloacas, alcantarillados, drenajes, canales de recolección de aguas pluviales, muros de contención, aceras, pavimentos, bacheos, asfaltados, reasfaltados, electrificaciones, alumbrados públicos, plazas, parques, canchas deportivas, entre otras", explicó.

En este sentido, el también abogado dijo que la falsa revolución socialista, a través de sus gobernadores y alcaldes, dejaron de invertir y financiar planes básicos integrales de infraestructura para el mejoramiento de barrios en municipios y estados, que tendían a resolver sus grandísimos problemas.

Esto ocurre porque no incluyeron en sus presupuestos anuales ni en créditos adicionales, la planificación y programación de presupuestos de proyectos urbanísticos de ingeniería para ejecutar obras de infraestructura urbana; con iniciativas de bienestar social que consoliden el hábitat de los sectores, barrios, zonas rurales y ciudades con la participación comunitaria que facilite su ejecución.

Además, abandonaron las políticas en áreas de educación, cultura, deporte, recreación y valores; así como planes para la formación y capacitación laboral y apoyo a emprendimientos productivos para la inserción social y la reinserción laboral.

Enfatizó que las actuales leyes regionales y ordenanzas municipales son contrarias al bienestar de los vecinos y sus comunidades, al tener "nulas inversiones" en sus presupuestos. Esto se contradice, a su juicio, con el compromiso asumido por los dirigentes del PSUV de generar el mayor grado de felicidad al pueblo, convirtiéndose en una gran mentira, porque tampoco genera empleo a través de la inversión pública.

"La verdad verdadera es que no hay partidas para inversión o para subsanar las grandes deficiencias o lo que necesitan los barrios y comunidades de los municipios trujillanos por medio de la construcción de obras de infraestructura y servicios. Se requiere retomar la aprobación de recursos y presupuestos que fortalezcan el tejido social urbano y comunitario que logren la integralidad desde lo físico, social, ambiental, económico y jurídico-legal", acotó.

Para cerrar, Marcos Montilla aseveró que este gobierno en sus 23 años de gestión nos ha llevado a un proceso de involución, donde los más afectados son la mayoría del pueblo venezolano a excepción de los enchufados del gobierno.

"Han trabajado para concentrar el poder en Maduro mientras que la Constitución obliga a hacer todo lo contrario. Descaradamente hablan del Poder Popular y Estado Comunal, cuando es todo un fraude. Desde Primero Justicia Trujilllo seguiremos trabajando por el cambio político y por un proyecto colectivo de país que rescate la democracia para profundizar la descentralización, cumpliendo con el mandato constitucional de crear leyes que otorgue a las regiones más competencias y recursos para que puedan librarse de sus problemas. A medida de que el país se pueda descentralizar, las gobernaciones, alcaldías y las mismas comunidades organizadas podrán combatir la pobreza de manera más eficaz, eficiente, efectiva y mejorar la calidad de vida del pueblo venezolano", concluyó.