Bogotá, 28 de febrero de 2019.- "El único que habla de intervención militar y guerra es Nicolás Maduro", dijo el excandidato presidencial de Venezuela Henrique Capriles. Quien ha sido un contrapeso del régimen de Maduro analizó la crisis en la que está sumergida su país. Se refirió a la tensión que durante las últimas semanas ha estado bajo la lupa del mundo y habló sobre las cartas que han puesto sobre la mesa, organismos como el Grupo de Lima, para lograr la salida de Maduro del palacio de Miraflores y la transición hacia la democracia en Venezuela.

"Pareciera que el régimen no tienen límites. No es un conflicto armado lo que hay en Venezuela, es una cúpula utilizando las armas contra la gran mayoría de venezolanos que están desarmados que quieren una solución pacífica", dijo. Aunque esta no es la primera crisis económica o política que vive Venezuela, para Capriles, en la que hoy está sumergida su país, es la peor de todas. El exgobernador del Estado Miranda explicó que la acumulación de la pobreza y la falta de la institucionalidad condujeron a la "mal llamada revolución", a la que describió como la estafa más grande de la historia venezolana. 

"Hoy tenemos la atención total de la comunidad internacional y una situación interna muy frágil para el régimen, a pesar de que en estos momentos ellos quieran dar la apariencia de normalidad", explicó. Más de 60 países reconocen a Juan Guidó como presidente interino de Venezuela. Al líder más visible de la oposición lo rodea también el apoyo de Capriles. "Hay una ruta compartida y un reconocimiento al rol que le corresponde a Juan Guaidó en este momento. Todas las diferencias se hicieron a un lado y creo que estos son vientos favorables porque es indispensable que exista unión de todo los que queremos cambio en el país. Juan ha sido una extraordinaria sorpresa, ha tenido algo que es muy importante para este momento y es la serenidad. No ha caído en las provocaciones. Tiene nuestro respaldo", aseguró. 

Aunque durante la entrevista, Capriles analizó los caminos que tiene su país para, en sus palabras, recuperar la democracia, también hizo varias referencias al papel que ha jugado Colombia como líder de la región ante la crisis, el recibimiento del éxodo venezolano y la participación del gobierno en las agitadas últimas semanas. 

Cuando se le preguntó por la opción de una intervención militar en Venezuela -que rechazó esta semana el Grupo de Lima-, Capriles aseguró que esa era una retórica de Nicolás Maduro. "Yo creo que le quedó claro a Colombia, como claro al mundo que el régimen de Maduro estuvo diciendo que detrás de la ayuda humanitaria iba una fuerza militar. ¿Ustedes vieron a algún soldado con fusiles tratando de entrar a Venezula?", dijo.  

Sin embargo, uno de los puntos más claves fue la observación que hizo sobre la postura del senador Gustavo Petro frente a la crisis. "Le pedimos a Petro que respete el dolor de los venezolanos", dijo. Capriles aseguró que en su país no hay un debate ideológico y que así como su país no interfiere en la política interna de Colombia, acá ocurriera lo mismo. "Agradecemos la solidaridad de los colombianos, pero ese señor fue capaz de burlarse al decir que aquí los automercados estaban llenos y que él no veía problemas de escasez", dijo sobre el exalcalde de Bogotá.

En  2016, Gustavo Petro publicó en su cuenta de Twitter imágenes de la visita que hizo a un supermercado de Caracas. En la publicación aseguró que, contrario a lo que se mostraba en los medios de comunicación del país, en Venezuela sí había abastecimiento. 

Según Capriles, el problema de su país no es sobre la izquierda o la derecha, sino sobre la gente que se muere de hambre y la cúpula que permanece atrincherada en el palacio de gobierno. "El único que habla de guerra e intervención militar para defenderse es Maduro y no lo aceptamos. Aquí lo que hay es una tragedia que tiene que ser atendida. Lo que pasa en Venezuela afecta a Colombia y a toda América del Sur", aseguró. 

Durante la última semana, han desertado e ingresado a Colombia al menos 400 uniformados de las Fuerzas Militares venezolanas. Una cifra que el régimen de Maduro desmintió este martes, asegurando que se trababa solamente de siete militares. Sin embargo, las fronteras entre Norte de Santander, Arauca y La Guajira se han convertido en los puntos principales de entrada al país de estos uniformados. 

A su llegada al país, los militares han narrado las difíciles condiciones en las que viven por la falta de alimentos dentro de los cuarteles y en todo el país. Sobre esta situación, Capriles denunció las condiciones en las que trabajan las tropas. “Las Fuerzas Armadas están como el país, muy frágiles. Los militares que han dejado de servir al régimen no son desertores, son patriotas”, dijo.

Aunque durante la jornada del F23, en la que Juan Guaidó esperaba ingresar la ayuda humanitaria a Venezuela, muchos ciudadanos se preguntaron por la participación de Capriles, el dirigente aseguró que no estuvo presente porque ese día estaba acompañando a los militares en el estado de La Victoria. "La ayuda humanitaria continúa. Este proceso no ha terminado porque el hambre y la escasez no se han resuelto. Ese día había que enviar un mensaje a la familia militar que están en una situación de mucha presión interna, mucho miedo y mucha amenaza de los altos mandos", dijo. 

En la entrevista, además reiteró su apoyo al liderazgo del presidente interino Juan Guaidó. "Yo defiendo y apoyo a Juan. Él ha dicho que va a regresar y no tengo ninguna duda de que lo hará. Hay mucha inquietud y cómo no la va a haber, pero este momento yo lo veo irreversible", dijo sobre el regreso del líder de la oposición, quien se encuentra desde el domingo pasado en Bogotá, a Venezuela.