Guarenas, 04 de noviembre de 2014.- Como pírrico calificó el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, el aumento de 15% al salario mínimo, anunciado por el gobierno central este lunes. “Los enchufados son los únicos que creen que 15% de aumento es suficiente para nuestro pueblo. Ellos creen que con ese porcentaje se resolverán los problemas del país, pero la realidad es que con ese incremento salarial no se le cambia la vida a nadie. 28 bolívares diarios no alcanzan ni para una empanada. Los venezolanos necesitamos que el salario se fortalezca, no que simplemente se compense con la alta inflación que tenemos”. 

Consideró que el 45% de incremento que se le dio a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), debió aplicarse a todos los trabajadores. “Nosotros celebramos cualquier incremento a los integrantes de nuestras Fuerzas Armadas, pero estos trabajadores no son más que los docentes, que los médicos o que cualquier otro trabajador venezolano. A todos nos afecta por igual la situación económica del país. A todos nos afecta la inflación, pero golpea más fuerte a quien tiene menos, a nuestro pueblo más pobre. Un incremento de 15% al salario mínimo es una cachetada a los venezolanos”.

Capriles, quien sostuvo una asamblea popular con vecinos del sector El Gueime de Guarenas, municipio Plaza, afirmó que la inflación, la cual oscila sobre 70%, deja sin efecto cualquier aumento salarial, por lo que aseguró que tal situación se resuelve incentivando la producción nacional. “El peor impuesto que se le puede aplicar a una persona es la inflación. La inflación que llevamos este año se come cualquier incremento del sueldo. La inflación hay que derrotarla y ¿cómo se resuelve?, produciendo, más y mejor. Sembrando en nuestras tierras y usando el petróleo como palanca para el desarrollo. Venezuela tiene todas las posibilidades de ser un país de progreso, de producir todos sus alimentos, y dejar de ser un país que depende de la renta petrolera”.

Sostuvo, además, que el Gobierno central no ha enviado los recursos a todos los estados y municipios para cancelar el incremento decretado el pasado mes de mayo. “No basta con un nuevo aumento pírrico, sino que estos enchufados ni siquiera son responsables para transferir los recursos a las gobernaciones y alcaldías para tener al día los compromisos con los trabajadores. A los trabajadores de Miranda, por ejemplo, les deben recursos para cancelar el diferencial de la homologación de los maestros. Ante esto, ellos tienen todo el derecho de movilizarse, y nosotros les brindamos todo el apoyo para reclamar sus derechos”.

Por otro lado, Capriles se pronunció sobre algunos hechos de corrupción del gobierno. “Cuando uno escucha a los voceros del gobierno no sabe qué es peor, si lo que hacen o lo que dicen para justificarlo. ¿Qué hace la familia y la niñera de un funcionario público viajando a Brasil en un avión de Pdvsa? A nuestro pueblo que creían en el proyecto del presidente Chávez, abran los ojos, este no es un gobierno socialista ni de izquierda, la ideología de este gobierno es la corrupción. No hay que olvidar que se robaron 25 mil millones de dólares de Cadivi. ¿Cuántas obras no se hubiesen hecho en el país con ese dinero?, imagínese nada más, cuántos hospitales, escuelas, obras de vialidad y ayudas sociales se pudieron hacer. Sin mencionar las mejoras salariales a nuestro pueblo”. 

El Mandatario mirandino también insistió en que el tema de la violencia no es un problema que se resuelve con mayor presencia policial, sino con la depuración y transformación del Sistema de Administración de Justicia. “De cada 100 homicidios, solo 8 tienen sentencia. Estamos hablando de 92% de impunidad, por eso el problema de la violencia no se resuelve. Si queremos derrotar la violencia tiene que haber una transformación del Sistema de Administración de Justicia y del Sistema Penitenciario, que todos cumplan su rol”.

Durante la actividad, el gobernador entregó varias obras sociales que ejecutó el Gobierno de Miranda en la comunidad, entre ellas un parque infantil, reparación de la escuela y la mejora de la cancha de usos múltiples.