Maracaibo, 27 de agosto 2014.- Si se le pregunta a los vecinos del Barrio Los Pescadores, parroquia Coquivacoa de Maracaibo, el tiempo que llevan aguantando que las aguas negras recorran sus calles, la gente responde: toda la vida. Vecinos lamentan que los años pasen y que no haya ningún avance en la consolidación de los servicios públicos para la comunidad.

Juan Pablo Guanipa, coordinador de Primero Justicia Zulia, aseguró que durante los últimos años, en la zona norte se han levantado urbanizaciones cerradas que, aunque al inicio presentaron los mismos problemas de servicios que los barrios, han podido resolverlos.

“El barrio Los Pescadores está paralizado. El tiempo pasa y ellos siguen igualitos. Llenos de problemas y enfermedades. Hay que revisar cuál es la situación porque no se pueden construir urbanizaciones afectando los barrios. Lo impresionante es que las villas ya han podido resolver sus problemas, mientras que Los Pescadores siguen estando entre las aguas negras. Aquí se necesita un proyecto completo de consolidación que cambie la calidad de vida de los vecinos que tienen más 20 años viendo aquí”.

Kerly Rodríguez, ama de casa de 45 años y habitante de Los Pescadores, aseguró que otro de los graves problemas que viven en la comunidad es el servicio del agua. “El agua que llega no es potable. La hervimos para beberla, pero igual se nos enferman los muchachos del estomago o de la piel. Si compramos cisternas o botellones de agua la cosa mejora, pero no es posible que tengamos que pagar 200 y hasta 300 bolívares semanales por un servicio que debería brindarnos Hidolago”.  

Milva Paz, vecina del sector, aseguró que se han vuelto cazadores. “Antes por lo menos nos llegaba bien el agua, ahora ni eso. Llega revuelta y de paso tenemos que ponernos a cazarla. Los pocos que tenemos bombas, las usamos, pero el resto no sé como hace. Lo peor es que esto se ha vuelto nuestra rutina. Saltar charcos de aguas negras y estar pendiente de cuando llegue el chorrito de agua sucia que nos envía Hidrolago. Esto no es vida. Ni las inundaciones producto de las lluvias han hecho que el gobierno haga algo por nosotros. Vemos como se levantan las villas y a ellos le solucionan rápido los problemas, pero a los pobres nos dejan que nos muramos en medio de la contaminación”.

Mercedes Yamarte, líder comunitaria, aseguró que en el barrio existen tres consejos comunales, uno cada sector. “Mientras no nos unamos y todos, incluyendo los tres consejos comunales, llevemos una exigencia a la gobernación y la alcaldía no nos harán caso. Hidrolago ha dejado que las aguas negras dominen nuestra comunidad, pero además la falta de recolección de basura y las obstrucciones en las mangueras de gas nos tienen quemando basura y cocinando en bombona o en leña. Así que aquí todo el mundo nos ha dado la espalda, tanto los rojos como los azules. ¿Habrá alguna esperanza para nosotros después de tanto tiempo? ¿Algún día podremos vivir tranquilos?”.