Maracaibo, 25 de agosto de 2014.- Henrique Capriles se montó de nuevo en sus botas para recorrer Venezuela. Con una pequeña maleta y dos juegos de ropa, el ex candidato presidencial vino al Zulia porque quiere avivar el deseo cambio de "este modelo comunista que les está triturando los huesos" a los ciudadanos.

El sábado caminó casa por casa dos comunidades en Maracaibo y San Francisco. En medio de su gira habló con La Verdad sobre sus motivaciones. Cree en la protesta social que suma a todos y no en manifestaciones políticas como las de febrero de este año. "Valiente no es el que tira piedras o tranca una calle, valiente es el que convence con el poder de sus palabras", sentenció.

Dice que no es momento de pensar en candidatos presidenciales ni en acciones alejadas de la Constitución. A sus críticos les recuerda: "Siempre he dicho que la única vida que estoy dispuesto a arriesgar es la mía. No quiero un reventón, mucho menos un golpe de Estado".

- ¿Por qué volvió al casa por casa?

- Después de la elección municipal yo he estado en un proceso de reorganización. Tengo claro cuál es el camino que hay que construir, la ruta que hay que seguir y creo que es ganar apoyo en estos sectores. Hoy, sin medios de comunicación, se gana espacio con presencia. No es un mitin, es un casa por casa que te da esa oportunidad de tener ese contacto directo.

- ¿Qué es lo que debate con la gente en este recorrido?

- La idea es generar un debate entre personas que piensan distinto. En eso es que tienen que estar concentrados los partidos, focalizar su trabajo en los barrios, en los sectores populares donde el Gobierno todavía tiene base de apoyo. En los sectores que ya están convencidos de que quieren un cambio no es donde deberías dedicar el tiempo y esfuerzo. Si ese trabajo lo hiciéramos todos, todos los días, te aseguro que hoy tendríamos un resultado distinto.

- ¿Qué cree que le faltó a las protestas de febrero para hacer efectivo al cambio que ustedes en la oposición buscan?

- Yo lo he dicho, yo estoy a favor de la protesta como mecanismo de expresión del pueblo, pero creo que si su objetivo es sumar a la mayor cantidad de personas, no puede tener un fin político. La razón tiene que ser un problema que viva la gente. Se sabía que venía una crisis económica. ¿Qué planteábamos nosotros? Organicemos, no provoquemos una crisis política, que no están dadas las condiciones; utilicemos la crisis económica y de instituciones para provocar una crisis política, que es la que tendríamos hoy con movilizaciones y expresión popular.

- ¿Esa oportunidad ya se perdió?

- No, en toda crisis surgen oportunidades, pero esto tiene que ser trabajo de abajo hacia arriba. Por eso yo estoy aquí en Maracaibo recorriendo para sumar personas al cambio. Nuestro trabajo es hablar, plantear y acompañar a los ciudadanos en los problemas que tenemos todos.

- ¿Abona el terreno para el año electoral?

- Claro, también es para eso, es que nada es excluyente. Hay que destacar la importancia que tiene la nueva Asamblea Nacional. Yo creo que uno de los errores que se cometieron en el pasado fue querer jugar en un solo tablero. Debemos tener la capacidad de jugar al mismo tiempo en varios tableros; unos estamos planteando el tema institucional y cómo salimos de la crisis económica, otros podrían tratar el tema político y así sumar todo y es una fuerza.

- ¿Repetirá como jefe de campaña para las parlamentarias?

- No, no seré jefe de campaña de la Unidad para las parlamentarias. No está planteado, ya yo cumplí una etapa en eso, fue un compromiso mío con los candidatos a alcaldes. Por supuesto que yo voy a ayudar en todo lo que pueda para cualquier proceso, no solo para las parlamentarias, que según el calendario, es el próximo evento. Repito, no está planteado para nada y no tengo el interés tampoco.

- ¿Aún se siente el líder de la Unidad?

- Ese no es un tema que a mí me preocupe, de verdad. Este no es el proyecto de Capriles, yo nunca he construido un liderazgo personalista. Me parece que esa idea de algunos, de plantear ahora las encuestas, no tiene ningún sentido, porque además empiezan las manipulaciones de encuestas. Aquí no estamos definiendo candidatos presidenciales, aquí estamos decidiendo quién es el jefe de la oposición. Si ese es el tema, pues es un grave error, porque no es el momento ni le interesa a la gente.

- ¿Siente que su posición ante las protestas le ha disminuido popularidad? 

- Yo no siento eso, yo estoy enfocado en los barrios y caseríos. Por ejemplo, yo siempre he dicho que la única vida que yo estoy dispuesto a arriesgar es la mía. Yo quiero que en el país haya un cambio en paz, yo no quiero una confrontación pueblo contra pueblo. Para mí, valiente no es el que lanza piedras o el que tranca una calle; para mí, valiente es el que convence con la fuerza de sus ideas, el que logra traer a nuestro movimiento alguien que piensa distinto a él, porque este país no se puede gobernar con la mentalidad de que el que asuma el cambio destruye al otro, yo no estoy de acuerdo con eso.

- ¿Cómo está su relación con Leopoldo López?

- Leopoldo, como Scarano, Ceballos, Iván Simonovis y otros muchachos que están presos, son nuestros compañeros, pues la libertad de ellos por supuesto que es un objetivo de nosotros y pienso que se puede lograr con la presión social, por eso es tan importante sumar al pueblo; insisto, en los barrios y caseríos, ahí es donde está el peso que inclinará la balanza.

- Y del Presidente Nicolás Maduro ¿qué opina?

- Mira, en un país en crisis como el nuestro no es el momento para que el Gobierno siga creyendo que tiene una posición de fuerza, de atropellar a otros, todo lo contrario. Creo que uno de los muchos y graves errores de Nicolás (Maduro) es no ser el gran promotor del encuentro nacional. Yo no soy de los que juega al caos, ni quisiera que aquí hubiese un reventón, menos un golpe de Estado, porque creo que sería un retroceso mayor al que estamos viviendo.