Caracas, 17 de septiembre de 2021.- La secretaria nacional de Educación de Primero Justicia, Katiuska Russo se pronunció este viernes ante el anuncio del régimen de Nicolás Maduro de iniciar las clases presenciales en Venezuela en el mes de octubre, al considerar irresponsable este llamado ante la poca vacunación contra el Covid-19, el mal estado de los planteles, los sueldos de hambre de los docentes y en general toda la crisis de servicios y económica que se vive en el país.

"¿A quiénes se les consultó sobre el inicio del año escolar con presencialidad? Se supone debe ser un tema tratado con seriedad y responsabilidad, donde opinen los padres, madres, representantes, responsables, los docentes, el ente oficial de salud y por el ultimo el Ministerio de Educación, evalúe, organice y haga el llamado", aseveró Russo.

La educadora indicó que "ciertamente la educación a distancia, en Venezuela no funciona en su totalidad, pues en este momento, de igual forma no están dadas las condiciones para recibir a los estudiantes de ningún nivel ni modalidad, de manera presencial".

Russo argumentó que "en primera instancia, porque estamos en una curva ascendente de la pandemia. Luego nos encontramos que la falta de inversión en la infraestructura escolar y en la educación en general, se agravó, las instalaciones están en franco deterioro, la calidad de los servicios públicos agua, electricidad, gas, transporte público brillan por su ausencia".

Explicó la educadora que hay instituciones que cuentan con una matrícula estudiantil de más de 500 estudiantes y solo está operativa una sala de baños.

"En la mayoría de las instituciones entra más el agua por techos y filtraciones que la que sale por los grifos ¿Cuentan los Planteles con el mobiliario (pupitres, mesas-sillas) para atender el estudiantado? ¿Cómo se vuelve a clases si en las instituciones educativas no se cuenta ni con desinfectantes básicos, para limpiar? ¿El Ministerio de Educación va a garantizar protocolos de bioseguridad? ¿A quién deseamos engañar? Es hora de asumir responsabilidades y darle a la educación el valor que se merece, en ella está el futuro del país".

La secretaria nacional de educación de la tolda amarilla preguntó "¿Cómo se vuelve a clases cuando existen cortes programados de electricidad? Los niveles de abandono por parte del estudiantado y del personal docentes son elevados, unos porque no ven la educación como movilidad social y los docentes porque por los bajos ingresos tuvieron que migrar a otras actividades económicas".

"Lamentablemente muchos de los estudiantes se mantenían en la educación formal porque recibían algún “alimento” pero resulta que el Programa de Alimentación Escolar (PAE) tampoco existe".

Russo acotó que para el inicio del Año escolar 2021-2022 en la modalidad presencial, se requieren como mínmo "el descenso de la curva de contagios de la Pandemia. La adecuación de todas las infraestructuras de los planteles. La dotación de material de bioseguridad, jabón y agua constante. La dotación de pupitres, mesas sillas, en fin, de mobiliario. Salario justo y suficiente para los docentes, aunado a todos los elementos que sostienen su seguridad social. Garantizar la plantilla completa en cada institución, de personal calificado. Protocolo de bioseguridad y salud para las instituciones y dotación para todos los involucrados en el sector educativo. Servicios básicos agua, electricidad, gas, transporte público, de forma regular".

Asimismo, la "reactivación del Programa de Alimentación Escolar (PAE); ejecución de protocolos por parte del Ministerio de Salud para la protección dentro de las comunidades educativas a fin de evitar se conviertan en focos de contagio masivo. Vacunación de todo el personal educativo, así como del estudiantado cuando se cuente con vacunas certificadas para el uso de niños y adolescentes".

En este orden la educadora realizó un llamado responsable para construir una ruta o plan consensuado para el regreso a clases, "establecer una metodología para trabajar con la comunidad, la población donde posiblemente sea factible reaperturar las instituciones y construir alternativas donde no se pueda. Es importante evitar las improvisaciones que pongan en riesgo la salud de estudiantes, profesores, trabajadores de la educación y familias en general".