Caracas, 01 de febrero de 2016.- Durante el foro “6D y Expectativas Económicas 2016” organizado por la Escuela de Economía de la UCV, el diputado a la Asamblea Nacional por el Estado Miranda, Ángel Alvarado Rangel, indicó que la coyuntura actual ha planteado como reto a la Asamblea Nacional, ejercer presión para generar un cambio político que permita un efectivo cambio económico porque el gobierno nacional no ha dado señales claras que indiquen su disposición a rectificar en esta materia”. En el foro también destacó la participación del economista y diputado por Distrito Capital, José Guerra.
Alvarado Rangel, expuso en el foro al que asistieron fundamentalmente jóvenes estudiantes de economía en la UCV, que es urgente atender la situación crítica de los sectores más empobrecidos en nuestro país. Indicó que su experiencia como servidor público en la Alcaldía de Sucre le permitió conocer de cerca la realidad de los 2 mil barrios del Municipio y enfrentarse diariamente a la pregunta: ¿por qué unos tienen tanto mientras otros tienen tan poco?, reflexionó el diputado y economista.
El parlamentario por Miranda reiteró que la crisis económica actual se generó antes de la crisis del petróleo, según él, “este deterioro del modelo se ha desarrollado desde 2002 y hay fenómenos como la corrupción y el endeudamiento externo que lo han acelerado”, indicó.
Sobre la posibilidades que tiene Venezuela como país para mejorar su desempeño económico, Alvarado indicó que “tenemos todo para salir de la crisis: venezolanos trabajadores dispuestos a luchar por el país, otros tantos que están fuera esperando volver para sumarse a la reactivación del aparato productivo, recursos naturales que tenemos el deber de aprovechar. Todo esta es una gran oportunidad y lamentablemente el progreso se ha hecho inviable porque el gobierno tiene 17 años tomando malas decisiones”, afirmó.
Ángel Alvarado también indicó que una grave debilidad que presenta nuestra institucionalidad en materia económica es que no se han definido claramente los derechos de propiedad y eso es la piedra fundacional de cualquier sistema de derecho que garantice las libertades económicas. El diputado insistió en que esa es un deuda que debe ser atendida de forma prioritaria.
El economista finalizó su intervención recordando que “cualquier sistema económico orientado a la prosperidad ofrece a sus actores un escenario donde reine la confianza como motor de las relaciones, sólo así se genera un clima de inversión y trabajo favorable para todos”, concluyó.