El principal enemigo es el miedo

-Señalas que luego de 8 de diciembre habrá una pugna interna en el oficialismo. ¿No puede degenerar esa situación en hechos extremos como un golpe?

-No tienen liderazgo. Una de las diferencias con ellos es que nosotros tenemos una unidad sólida, un líder y un programa. Ellos están dispersos, sus liderazgos, como el de Maduro, Cabello o El Aissami, son una chivera. Están fracturado y como carecen de programa, visión y líder, sólo les queda la alternativa de la fuerza. En cambio, nosotros tenemos apoyo popular, un programa y una unidad fortalecida.

-Luego de anunciar la aprobación urgente de la Habilitante, ahora frenan el impulso. ¿Es que no aparece el diputado 99?

-El diputado 99, hasta el día de hoy, no existe. El Gobierno apostó a un acto de corrupción con la complicidad de la Fiscal en el caso de la diputada María Aranguren. Ellos están tratando de sincronizar los tiempos de ese juicio abominable para contar con el diputado 99, el suplente de Aranguren, a quien han extorsionado. El pidió la palabra y describió la persecución y el hostigamiento al que lo han sometido a él y a su familia.

-Pero, ¿lo lograron?

-Están en proceso.

-Un tipo tan circunspecto y frío como tú, ¿por qué pierde los estribos en la sesión con Maduro?

-Soy enemigo del conflicto y la pelea. Pero también de la injusticia. Lo que hice en la AN, levantarme, gritar, reclamar la palabra (aun cuando no tuviera ni imagen de TV ni audio) es un pequeñísimo testimonio de cuál es nuestro principal enemigo: el miedo. Hay una frase de Juan Pablo II a los jóvenes que luchaban contra el comunismo en Europa Oriental: "No tengan miedo". Y eso es así porque Dios, el bien, la historia y la verdad, están hoy más que nunca vigentes en Venezuela. El día en que venzamos el miedo, nadie nos detendrá.